Me quiere, no me quiere...
Me quiere, no me quiere. Me quiere, no me quiere. Que hago? Me quiere, no me quiere. Me quiere, no me quiere. Vale la alegría? Ya ganó demasiado la pena. Me quiere, no me quiere. Me quiere, no me quiere. Existe, no es el final del túnel, pero la luz enciende al alma. Me quiere, no me quiere. Me quiere, no me quiere. Nunca supe por qué desojé ese tiempo tan lacónico con demasiadas lágrimas. Me quiere, no me quiere. A veces lleva demasiado abriles quitarse las espinas del alma.