Luces y Sombras.

Hay días, se dividen en más días hasta llegar a los días  que nunca vendrán. Todo es parte de una rueda, gira en la cabeza tan aprisa, en esos besos salados de una sombra sideral. La vida cuenta a la inversa del hombre, un frenesí del destiempo, hay lágrimas sin piel aún así, abrazan al mar. No es uno, son miles los silencios con un cuchillo entre dientes. Mirar al cielo,  pedirle ayuda a su peor invento, el misterio no necesita más chistes.

He sido esclavo de la mentira y sus sueños, he parido frases que han partido por las vías parpadeantes del silencio. He viajado despierto, a lugares que solo existen  en la piel del tiempo. Lloré, de un charco,sin querer,  estoy a merced de un océano. Quién no? Abracé mís verdades, la mentira reía. Todos se fueron de mí parte, construí mis estrellas con versos, pero fue imposible. En cada instante hay una eternidad que una vez me dieron tus besos.

Las ramas como cuerdas del viento, la lluvia como tambor de la tarde, mí alma como un hogar para los recuerdos, el sol como efigie de la suerte. El domingo cómo eslabón de una cadena para atar los rumbos en los balcones, ahí hay flores sin perfume, partículas de melancolía que llegan a mí boca. Hay una grieta en el tiempo, desde siempre, luchan el agua y el fuego, el hombre y la pretención de eternidad. Las manecillas no piensan, solo avanzan, Ay de mí y de este domingo que no tiene piedad por nadie...

Vuela la sombra sobre un pedazo de carne, justo cuando el sol  encaprichado, suelta sus rayos. Nunca pasan las horas, ni llega la noche, ni asoman las estrellas, pierde la noción del amanecer. Algunos sonidos, cómo tenues notas musicales, cómo la última lluvia  que tocó su pena en los techos del alma. Tentáculos de hierro, macabro rostro para el mundo. Y si la sombra da vueltas por qué en realidad sueña con ser abrazada?

Sus brazos volaron a su encuentro, un día de lluvia, ahi brillaban más las lágrimas, los corazones  mezclados con el sonido del agua, era la última vez que el amor les habría la puerta. Al tercer beso perdieron la razón. El amanecer encontró una cama vacía, un sol adolescente, un reloj cansado. El silencio llegó tarde, el mundo no se dio cuenta, la locura no estaba,  solo el recuerdo de algunas lágrimas, el amor es el primero que viene y se va, hace el mismo papel de siempre.