La muerte no sabe la vida que se pierde...
En las escamas del infinito el hombre puede tejer su gloria, con la última bocanada dejar leyendas para la posteridad. Cada paso es un vendaval, un instante lujurioso del mañana. Un respiro del pasado, un trozo de máscara que se le cae al futuro. Hay momentos, los imprescindibles se quedan, los importantes luchan, los innecesarios ya son patrimonio de la nada. Por que ahora soy, ahora vivo, ahora lucho. La muerte no sabe la vida que se pierde.