El orgullo.
No necesito correr tras las agujas del reloj ni sentir el viento golpear la espalda suspirar lejos de lo ortodoxo me basta, conquistar a la bestia de vez en cuando. Lejos de estar en el punto ni detrás de una misera coma, escribo mi propia historia lejos del polvo que oxida al papel. Una a una las miserias irán pasando los sueños mueren si renunciamos a ellos, has visto al sol desencajarse ante el atardecer aún sabiendo que morirá en los senos de la luna? El orgullo, el orgullo por la libertad nos mantiene a flote; si pretenden encontrarme sepan que estoy en el antónimo de la muchedumbre.