Torpe...

Te azotan los astros 
con su memoria frágil, 
un cachetazo
al centro del tiempo,
un baile sin pausa
para un mundo que tiene
 tanta sed de vencer.

Parado en la sombra 
del último trago 
no hay amigos
para las lágrimas,
todavía brota sangre
después de la insolencia,
nadie sabe por qué.

Torpe!
grita el silencio desde la otra esquina.
Lo que queda de la noche
transa con la mañana
 se esconde  para volver
cuando duerma el atardecer.

Blasfemias
adornadas con fe
la soledad devora el alma
luego eructa un recuerdo
 resulta que eso
es suficiente para volver a empezar.

Engañar al alma
con pequeños jirones de felicidad
mientras las estrellas pestañean
el hombre oculta su paraíso interno
para que nadie sepa
cuanto puede brillar.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Todo lo que necesito...

Ganas de amar.

Vale la pena...